Fui diagnosticada de diabetes tipo 1 a los 13 años. Desde entonces he vivido la importancia de poder contar con el acompañamiento de profesionales que sepan acoger lo singular de cada uno. Contar con el apoyo familiar será esencial. A menudo se olvida que los familiares también se pueden sentir desbordados y deberían ser tenidos en cuenta en estos momentos iniciales.
Si te acaban de diagnosticar de diabetes (tipo 1, tipo 2, gestacional…), puedes encontrar a estas personas entre tu equipo médico (médico y enfermera), y entre aquellas que hayan pasado por lo mismo.
Si el diagnóstico de la diabetes te supera emocionalmente, considera la posibilidad de buscar ayuda también para tu parte emocional, recurre a un pro-fesional, a un psicólogo especialista en diabetes.
Tengamos presente que lo emocional también afecta a nuestro cuerpo. Cuerpo y mente están íntimamente relacionados.
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Dos historias que sirven de ejemplo
Comparto con vosotros dos historias de las que fui testigo.
El debut de Juan Ignacio
Juan Ignacio, de 44 años, acudió a urgencias por sentir mareos y náuseas. Nunca había tenido problemas de salud, por lo que era su primera vez allí. Tres horas más tarde, en la misma sala, se le acerca un personal sanitario que, de forma rápida y con prisas, le comunica: “Tienes diabetes tipo 1, ven que te voy a enseñar a pincharte, y te voy a decir lo que tienes que hacer”.
Juan Ignacio, al poco de salir de urgencias se sentó en un banco de la calle y empezó a llorar amargamente.
El debut de Alejandro
Alejandro, de 25 años de edad, al igual que Juan, también acude a urgencias con síntomas similares. Después de una larga espera, un personal sanitario le pide que le acompañe a un despacho, se sientan los dos, y amablemente, pasa a explicarle lo que es la diabetes tipo 1 de una manera sencilla y clara.
Alejandro le manifiesta el temor que siente ante el nuevo diagnóstico que está recibiendo. El profesional le tranquiliza y lo acompaña en el proceso de empezar a entender la enfermedad y como abordarla.
Alejandro, ya más tranquilo agradece el haber recibido esa explicación y el acompañamiento en este momento duro para él.
La importancia de recibir el diagnóstico en un contexto humano
La diabetes es una enfermedad crónica, lo que significa que nos acompañará durante nuestra vida. Por ello, frente a tener que afrontar la noticia, poder recibir el diagnóstico en un contexto humano, donde las palabras nos sirvan de aliento, tranquilidad y alivio, nos puede ayudar a recibirlo de una mejor manera.
Juan Ignacio se sintió realmente abandonado a su suerte, tornándose este diagnóstico en algo traumático para él. Esto le dificultó aprender lo necesario de la diabetes, así como poderlo manejar para convivir con ella de la manera más amable posible.
No todos somos iguales, y nuestras características personales también van a ser importantes en cómo recibamos el diagnóstico de diabetes. Nuestra biografía habrá que tenerla en cuenta, ya que va a tener que ver con cómo nos manejemos en nuestra vida, cómo asumamos la incertidumbre, y cómo nos relacionemos con los demás y con nosotros mismos.
Así cada persona necesitará su tiempo para ir incorporando la diabetes a su vida.
Ya lo dice el refrán, “vísteme despacio que llevo prisa”.
Pongamos palabras compañeras en esta andadura que comienza con el diagnóstico de la diabetes…
“Tiempo al tiempo,
cada huella irá encontrando su arena,
cada beso deteniendo un momento,
y cada canción matando una pena.”
Frida Kahlo
Autor | María Eugenia Muñoz Fernández. Psicóloga Clínica. Especialista en Diabetes (Adultos). |
Especialidad | PSICOLOGÍA CLÍNICA |
Teléfono | +34 91 436 26 36 |
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