Es común pensar que el riesgo de sufrir quemaduras solares y lesiones en la piel debido al sol ocurre solo en verano. No es así. Nos hemos despedido del calor y del sol constante, pero lo cierto es que en esta época del año también es necesario que nos protejamos de los rayos ultravioletas (UV) tanto con cremas solares como con gafas de sol. Además, el sol seca la piel y puede causar envejecimiento prematuro.
Hay que utilizar filtro solar todos los días con un factor de protección 30 como mínimo, que se debe aplicar cada dos o tres horas, también en invierno. Conviene igualmente el uso de protector labial y de gafas de sol, ya que éstas ayudan a prevenir las cataratas y el cáncer de piel alrededor de los ojos.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estiman 130.000 nuevos casos de melanoma por año. En concreto, en España cada año se diagnostican alrededor de 3.200. Resulta preocupante, además, el hecho de que el melanoma maligno es muy alto entre los adultos jóvenes de 15 a 34 años.
Deportes al aire libre
Los consejos mencionados hasta ahora deben extremarse cuando se practica deporte al aire libre, como por ejemplo en la nieve, que es una de las opciones más apetecibles de la temporada que se avecinan para los amantes del ski, snowboard… Este tipo de deportes suele realizarse en zonas altas, de montaña, lo cual también resulta un factor de riesgo para sufrir los efectos perjudiciales de los rayos ultravioletas.
Y es que los niveles de radiación UV son más intensos a mayor altitud que en la playa. Esto se debe a que hay menos aire para filtrar los dañinos rayos UV y el aire que hay es más limpio, lo que causa un aumento en los niveles de rayos ultravioleta en un 10-12% por cada 1.000 metros de altitud.
Por otro lado, la nieve puede llegar a reflejar hasta un 85% de la radiación UV. Esto significa que dicha radiación llega no sólo directamente desde arriba, sino también indirectamente al ser reflejada. Como resultado, los esquiadores se pueden quemar en lugares inusuales, tales como debajo de la barbilla y la nariz; o incluso estando en la sombra.
En resumen, no olvides protegerte del sol durante todo el año, tu piel y tu salud te lo agradecerán.
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| Especialidad | ¡Cuidado! El sol daña tu piel todo el año |
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