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Cerdo y prevención de ECV

Las enfermedades cardiovasculares (ECV),  aquellas que afectan al corazón y a los vasos sanguíneos, suponen la primera causa de muerte en Europa. La incidencia de estas enfermedades está muy relacionada con los estilos de vida: una alimentación inadecuada rica en grasas y azúcares; una vida sedentaria, el hábito del tabaco y del alcohol, favorecen su desarrollo.

 cerdo

Por el contrario una dieta rica en frutas y verduras, legumbres, cereales y frutos secos; lácteos desnatados, carnes magras, pescados y huevos como fuente de proteínas de alto valor biológico; y aceite de oliva como grasa de adición y cocinado, lo disminuyen considerablemente. Este tipo de dieta es llamada Dieta Mediterránea. También tiene un efecto muy positivo la actividad física moderada, el control del peso y el consumo moderado de alcohol.

Dentro de las carnes magras, cobran una especial importancia en nuestra Dieta Mediterránea, la carne de cerdo ibérico, animal presente en península ibérica desde hace siglos. Sus cortes magros  (carne magra, lomo, solomillo) proporcionan  proteínas de alto valor biológico y un  bajo aporte de grasa y colesterol. Además, presentan vitaminas y minerales potencialmente beneficiosos a nivel cardiovascular. Su bajo contenido en sodio los convierte en adecuados para prevenir las cifras elevadas de tensión arterial.

A continuación ofrecemos una comparativa de la energía y del contenido en lípidos y en colesterol de distintos tipo de carne magra:

Energía (Kcal)* Lípidos (g) Colesterol (mg)
Cerdo, carne magra

155

8,3

69

Cerdo, lomo (3% grasa)

104

2,65

58

Cerdo, solomillo

130

5,1

72

Ternera, carne magra

131

5,4

59

Pavo, pechuga sin piel

100

1,4

55

Pavo, sin piel

109

2,4

65

Pollo, pechuga

112

2,8

69

Pollo

167

9,7

110

Tablas de Composición de alimentos de, Olga Moreiras y col, ed. 2010

 *Kcalorías por 100 g de producto

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